Recapitulando... con la excepción del post anterior, en que sólo agregué unas fotos, desde el día 68 que no actualizo nada relevante en el blog. Unos 49 días sin novedades diría alguien ingenuo.
Pues no!
En estas jornadas no registradas en lo escrito, pero si en mi memoria forever and ever (uy que cursi), pasó todo esto:
- Terminé de trabajar en la packhouse después de 40 y algo de días.
- Me hice muchos amigos de esos que gratamente seguiría viendo el resto de mis días, y a los que actualmente estoy extrañando bastante! (Los cordobeses Mati Rufe y Mati Carra, Gaby, Mari, Vicky; el racinguista insoportable y compañero de aventuras Manu, los concubinos Gina, Pipi y Pablo; las eslovacas Zuzi y Maia: el duo traca traca Celi y Con:, el triplete argento Mati, Nico y Caro; la pareja famosa Ari y Tincho; los chefs franceses Anna y Tanguy; la españolagallegacatalana Anna: el inglés de Middlesborough que habla raro y se llama Jozef; el israelí que pone los pelos de punta Nadav; los mejicanos Sula y Edu; Tali mi buen amigo de Tonga que me invitó a su hogar; Achu, el chino que sorprendió y era más picante que Pereyra (Picante, te odio, sabelo); Laurent, le francais; y mucha gente más con las que hice buenas migas!)
- Recordé que al viajar, uno entabla lazos muy fuertes y muy veloces con la gente. No me gustan las despedidas, y despedirme de toda esta gente costó horrores! Entre el facebook y el celu uno sigue en contacto, pero siguen las ganas de reencontrarse! Con algunos se podrá, por la proximidad geográfica (si es que todos volvemos a nuestros hogares......), pero con otros, los de Inglaterra, Francia, Eslovaquia, China, Tonga, etc, sólo quedan las esperanzas. Y las redes sociales.
- Me compré un auto para mi solito: un Mitsubishi RVR ´95, que pistea de lo lindo, y ahora que estoy viajando se ha vuelto mi hogar y depósito!
- Russell, compañero de laburo, callado, tímido y grandote, resultó ser piloto. Y resultó que nos llevamos muy bien, que resultó en que me invitara a volar en un biplaza, y hasta me dejara pilotear por unos minutos.
- Decidí emprender un breve viaje sólo, y desde el domingo 16 que estoy así, conociendo lo que llaman el Far North., que se supone es el norte de Northland. Ahí conocí Cape Reinga, el punto que une el Tasman Sea y el Pacific Ocean. Y luego, Spirits Bay.
Pero sobre todo, me di el gusto de manejar en mi auto la "90 Mile Beach", una playa de apenas menos que esas 90 millas, muy ancha, muy recta, y muy larga. Oscilé entre los 50kmm/h y los 100 km/h, dependiendo de lo que me dejaba la dureza de la arena. Esta playa está considerada una ruta oficial, y es totalmente legal recorrerla en auto. Lo curioso es que finalmente, volver por ahí fue más rápido que por la ruta, que al tener curvas y contracurvas, no te deja ir tan rápido como la rectilinea y vacía 90 Mile Beach.
- Dormí por primera vez en mi auto, en el pueblito de Rawene, compartiendo chasis con Svenja, una alemana con quien hice el viaje a Cape Reinga para compartir charlas y gastos.
- Pasée en un día horrible por el Waipoua Forest, otro bosque de árboles Kauri, que son enormes e imponentes. Volví a disfrutar de la soledad, de poder quedarme por vaaaarios minutos sólo contemplando algo tan simple pero tan como un árbol grande grande, muy muy grande.
Tane Mahuta - Lord of the Forest
51.5 mts de altura
13.8 mts de circunferencia
Te Matua Ngahere - Father of the Forest
The 4 Sisters
Y volví a recordar otros grandes momentos contemplativos en mi vida:
- Quedarme en el árbol de cerezas en mi casa de Plaza Huincul, o en el techo de la casa comiendo uvas, y ver la gente pasar, pero que ellos no me vieran a mi.
- Sentarme en un banquito cerca de la casa de los Abasolo en Londres, mientras escuchaba, siempre, Mediterranean Sun, con las hojas de tonos cálidos que caían alrededor.
- Perderme por las calles de Venecia, Florencia y Roma, culla belleza impacta, por los colores, la gente, la historia.
- Comer salamin en las terrazas de Machu Pichu con amig@s.
- Viví, aún vivo, en Paihia con una magnífica familia, los Vezey (Melanie, Mark, y los explosivos nenes Jag y Finn). Dicen que hago wwoofing, pero en realidad ayudo en tarea del hogar, mientras charlo de la vida, voy a pescar con los nenes, salgo a caminar con Melanie.
- Y me hice un "Tā moko", un tatuaje en base a la historia de vida de cada uno. Por casi 2hrs hablé con Paitangi de mi vida y de la suya, y por otras 2hrs me hizo el tatuaje.
